Estoy en Internet...¿Comorrll?
Imaginate que un día durante estas vacaciones haces topless, o simplemente paseas por una playa nudista, y resulta que un "gracioso" decide hacer una foto con su móvil a tu esbelta figura. Dias mas tarde estás navegando por Internet a punto de entrar a ver tu correo, y de pronto recibes un "pop-up" (una ventana emergente), donde resulta que aparece la estampa que te hicieron, a la vista de millones de ojos de todo el mundo.
Si a alguien se le ocurre colgar una foto sin tu permiso o un vídeo en el que tu eres, el protagonista, debes saber que la última y más efectiva acción contra este hecho es denunciarlo al Grupo de Delitos Telemáticos o a la Brigada de Investigación Tecnológica.
Pero antes de dar este paso deberias intentar dar con el propietario de la página. Si lo localizas tienes que dirigirte a él para que retire la imagen. Si el titular del dominio está en el extranjero, hay que comprobar si en alguno de los apartados de la web indica cómo reclamar, según la responsable del servicio de Defensor del Internauta, Ofelia Tejerina.
Al parecer, denunciar no siempre es posible. Si la imagen está tomada en un lugar público y «apareces como una persona meramente accesoria». Aunque si finalmente te decides a denunciar, el juez puede considerar que esa imagen robada «supone una lesión a la dignidad de la persona» y, al ser publicada en internet, podría ser tratado como «injuria».
El tratamiento de la imagen de una persona puede afectar en principio a cuatro derechos fundamentales distintos (por separado o conjuntamente): el derecho a la intimidad, al honor, a la propia imagen y a la protección de datos. Dependiendo de si se trata de uno u otro caso, deberá seguirse la vía judicial o administrativa, como un conflicto privado o como un delito», dice Tejerina.
Las penas conllevarían el cese de la publicación y sanciones económicas. En último extremo supondría penas de prisión de entre 2 y 5 años por considerarse como un delito de revelación de secretos. Aunque en el caso de que se «borre» la cara y la persona sea irreconocible, el que ha publicado la foto no tendrá ningún problema.
Fuente: ABC
Si a alguien se le ocurre colgar una foto sin tu permiso o un vídeo en el que tu eres, el protagonista, debes saber que la última y más efectiva acción contra este hecho es denunciarlo al Grupo de Delitos Telemáticos o a la Brigada de Investigación Tecnológica.
Pero antes de dar este paso deberias intentar dar con el propietario de la página. Si lo localizas tienes que dirigirte a él para que retire la imagen. Si el titular del dominio está en el extranjero, hay que comprobar si en alguno de los apartados de la web indica cómo reclamar, según la responsable del servicio de Defensor del Internauta, Ofelia Tejerina.
Al parecer, denunciar no siempre es posible. Si la imagen está tomada en un lugar público y «apareces como una persona meramente accesoria». Aunque si finalmente te decides a denunciar, el juez puede considerar que esa imagen robada «supone una lesión a la dignidad de la persona» y, al ser publicada en internet, podría ser tratado como «injuria».
El tratamiento de la imagen de una persona puede afectar en principio a cuatro derechos fundamentales distintos (por separado o conjuntamente): el derecho a la intimidad, al honor, a la propia imagen y a la protección de datos. Dependiendo de si se trata de uno u otro caso, deberá seguirse la vía judicial o administrativa, como un conflicto privado o como un delito», dice Tejerina.
Las penas conllevarían el cese de la publicación y sanciones económicas. En último extremo supondría penas de prisión de entre 2 y 5 años por considerarse como un delito de revelación de secretos. Aunque en el caso de que se «borre» la cara y la persona sea irreconocible, el que ha publicado la foto no tendrá ningún problema.
Fuente: ABC
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